Historia de un monumento polémico en Budapest

Es necesario establecer un marco histórico y geográfico para comprender lo que rodea al monumento conmemorativo de la segunda guerra mundial que se instaló en Budapest en 2014.

En 1940 el almirante Miklós Horthy, regente de tendencia ultraconservadora en Hungría, se unió al eje y a Adolf Hitler ofreciendo su apoyo en el pacto tripartito. Alemania sedujo a Hungría con la idea de recuperar territorios históricamente perdidos en el Tratado de Trianon.  Entre tanto, surgió el partido fascista húngaro de la Cruz Flechada. De tendencia antisemita y catalogados por los historiadores como más terroríficos que los propios nazis, se encargaban de sacar a los judíos húngaros de sus casas con la invitación a darse un baño en el Danubio. Les pedían que se quitaran los zapatos y los dejaran en la orilla. Ataban con alambre y en hilera a grupos enteros. Disparaban en la cabeza al que estaba en primer lugar y disparaban al que estaba el último. Todos caían arrastrados al fondo del Danubio. Uno de los episodios más aterradores de la historia.

Durante el transcurso de los años y debido a distintas causas (entre ellas las deportaciones masivas de judíos húngaros), las relaciones entre el gobierno de Hungría y Alemania fueron menguando (Miklós Horthy mantuvo contacto con los soviéticos e intento cambiar de bando ante la inminente derrota del eje) hasta que en el año 1944 las tropas alemanas entraron en Hungría, ocupándola sin encontrar resistencia. Después de la batalla de Budapest, el gobierno húngaro colapsó y Hungría fue ocupada por el Ejército Rojo, que convirtió el país en un estado socialista. Durante las siguientes décadas Hungría estuvo subyugada a la URSS generando ampollas dado que su comunismo no había surgido ante el levantamiento del pueblo sino por la ocupación.

En 2014, el gobierno de Hungría buscaba un lavado de imagen. Para ello, instalaron de noche y a hurtadillas una escultura que con seguridad generaría polémica. El monumento que conmemoraba la Segunda Guerra Mundial.
En primer lugar tenemos la columnas griegas rotas representación simbólica de la democracia. No rotas por los años sino por el ataque del águila que hay sobre las cabezas. En la parte superior se encuentra dicha águila, encadenada en su pata derecha ,como representación del rercer Reich, atacando por la espalda al arcángel San Gabriel (símbolo de la Hungría cristiana). La escultura pretender mostrar a Hungría como una víctima más del nazismo. 
Se trata de una escultura que intenta eludir la participación de una nación en un genocidio que acabó con la vida de 450000 humanos. 



¿Que habría sido lo esperado? Durante su instalación, cientos de manifestantes (historiadores y organizaciones) colocaron pancartas en protesta. Lo esperado habría sido que tirasen abajo la escultura pero como símbolo de civilización, colocaron justo debajo un contra-monumento. El contra-monumento pretende recordar los miles de judíos exterminados y la responsabilidad del país durante la Segunda Guerra Mundial, mediante maletas de viaje, zapatos y fotografías de la época.


Sin quererlo, el monumento y el contra-monumento enseñan al mundo lo que fue y lo que es el pueblo húngaro. ¡Recordemos!

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